Luego, caminó hacia el estrado sin que nadie del público pudiera acercarse a más de un metro, dio un pequeño discurso en inglés, el cual todos aplaudieron con entusiasmo, ...de pronto todos eran bilingües, al menos eso parecía.
Mika Hakkinen dando unas palabras. |
Posando para los medios de prensa.
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Mika probaría el circuito , yo sería su afortunado acompañante y el único que podía estar a su lado sin ser mal visto por su gente de seguridad, lo saludé amablemente y él respondió de la misma manera, nos dimos un aprentón de manos y luego de algunos “por favor... “ y “gracias...”, nos dispusimos a subir al auto pero, de pronto ocurrió lo inesperado, el celoso guardián de las llaves del Mercedes Benz 350 CLK, había desaparecido, allí estábamos Mika, el auto, el público y no aparecía la llave, para no creerlo.
Pero en el Perú la gente es generosa, un señor del público, cliente premium de la marca, al vernos en apuros, nos ofreció su Mercedes Benz C63 AMG, un V8 de 450 HP, para reemplazar al auto sin llave, corrí hasta el auto, lo arranqué de inmediato, sentí la potencia y suavidad del motor, me bastó recorrerlo apenas unos pocos metros para notar el impresionante torque de su potenciado y muy equilibrado motor en V, parecía que las llantas se llevaban a rastras parte de la superficie de la pista, impresionante; cedí el auto a Mika y dimos tres vueltas que recordaré siempre, me dijo que el circuito estaba perfecto, aunque era muy resbaloso, no puede evitar percatarme de que él y un miembro de su equipo, que iba en el asiento de atrás, estaban divirtiéndose a lo grande.
Hakkinen empieza a girar en el circuito
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Observando el potente AMG de 450hps
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Luego se hizo un sorteo para elegir a que lo acompañarían a dar una vuelta al circuito, y los afortunados empezaron a subir, recuerdo en especial a uno de ellos, porque bajo rojo y con los ojos desmesuradamente abiertos, la gente río y yo también.
Sorteo para un paseo con Mika
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antes de dar una vuelta más.
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Espectacular derrape de Mika.
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